Aventura: Parapente y Ala Delta
El parapente tiene en el Perú una serie de escenarios con bellos paisajes en Lima y al interior del país. Existen empresas especializadas que brindan el servicio para una travesía por los aires, con instructores registrados en la Asociación Peruana de Vuelo Libre.
En el Perú tiene cientos de adeptos y es una atrevida manera de combinar turismo y deporte. En la actualidad, los planeadores plegados miden 5 metros y armados 10 metros, y pesan 35 kilos aproximadamente. Son sumamente fuertes, estables y maniobrables.
El valle del Urubamba, o Valle Sagrado de los Incas, (ubicado en el Departamento de Cusco), cuenta con un abanico de posibilidades para desarrollar un turismo cargado de adrenalina.
Volar en parapente o ala delta, junto a instructores muy calificados, resulta una agradable propuesta. Uno de los servicios más frecuentes se inicia en la ciudad en la Plaza de Armas con destino al Mirador de Calca. Se puede realizar un vuelo de unos 20 minutos con una vista panorámica de las montañas nevadas y el verde valle.
Por su parte, en Lima se puede admirar desde el aire todo el circuito de playas conocido como Costa Verde y el distrito de Miraflores.
Lo usual es despegar (en parapente o en ala delta) del Parque Raimondi, ubicado en el malecón. En pocos minutos se vuela sobre el mar, y se puede apreciar los altos edificios y el centro comercial.
Al sur de Lima se encuentra el distrito de Pachacamac, en cuyo valle se práctica el parapente. Al salir desde las laderas de las montañas se aprecia el valle en toda su magnitud y por la velocidad de los vientos, el sobrevuelo siempre se cuenta con ideales condiciones. La mejor temporada es desde octubre hasta abril. Los vuelos pueden tener una duración de 20 minutos aproximadamente.
En el Callejón de Huaylas y en especial en los alrededores de las ciudades de Huaraz y Carhuaz, hay diversas zonas desde donde se puede iniciar el vuelo en parapente y ala delta. El punto más conocido es el Cerro Pan de Azúcar en Yungay. Desde el aire se aprecia mejor la Cordillera Negra en contraste con la Cordillera Blanca, donde se ubica el nevado Huascarán.